El ‘Depredador’ deberá cumplir el resto de sanción que le interpuso el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), por dar positivo en un resultado analítico adverso por benzoilecgonina.
Guerrero acudió entonces a la justicia ordinaria, interpuso una apelación y un Tribunal Federal suizo levantó provisionalmente el castigo, permitiéndole jugar en Rusia, donde Perú cayó en la fase de grupos.
A diferencia de su anterior club, Inter de Porto Alegre se pronunció después de que Globoesporte difundió la noticia de la revocación de la suspensión de Paolo Guerrero.
La Suprema Corte de Suiza ha decidido que Guerero sí es culpable de dopaje por lo que no podrá volver al terreno de juego en lo que resta del año y será hasta el año entrante cuando pueda volver a ver acción con cualquier club que muestre interés en contar con sus servicios.
El pasado 31 de mayo, la Justicia suiza había decidido suspender la sanción de forma «provisional», como consecuencia de un pedido de forma urgente -similar a una medida cautelar- por parte de Guerrero.
Paolo Guerrero, con zapatos y pantalón de vestir, en su presentación como nuevo jugador del Inter de Porto Alegre.
Es así que luego de tantas idas y vueltas, habilitaciones y suspensiones, ahora la Justicia determinó en Suiza que Guerrero no podrá jugar durante todo el 2018 y recién podrá reaparecer en las canchas en 2019.
A través de su cuenta de Twitter, el club ‘Colorado’ avisó que aun todavía no reciben una notificación oficial sobre la decisión del tribunal.